Vigésimo Quinto Día: Domingo 17 de mayo de 1953

 

Llegó en ese día a Sabana Grande el primer tren especial repleto de peregrinos, procedente del pueblo de Aguadilla, quienes ansiaban visitar el Barrio Rincón, sitio de la aparición. El ferrocarril que arribó a Sabana Grande a las 11:30 de la mañana regresó para Aguadilla a las 5:00 de la tarde y, según manifestaciones de su conductor, ya se habían realizado planes para traer un tren expreso de peregrinos diariamente a Sabana Grande, hasta el día 25 de mayo, cuando la Virgen haría un milagro para todos.

Ya para esta fecha se había instalado en ese sitio una estación de radioemisora portátil que diariamente anunciaba al pueblo de Puerto Rico los milagros que ocurrían.

Bajo una pertinaz llovizna que duró toda la noche y la mañana de ese día, se observaba como se movían lentamente las interminables filas de peregrinos en busca del agua que sanaba a los enfermos. La fría lluvia de ese día caía sobre las mujeres que llevaban niños en los brazos y los hombres arrastraban carretones con enfermos, todos con preocupaciones en sus hogares pero llenos de paz, fe y esperanza.