Vigésimo Sexto Día: Lunes 18 de mayo de 1953

 

En ese día, ya desde las tres de la madrugada, toda la carretera de dos kilómetros y medio que conducía desde el pueblo de Sabana Grande hasta el Barrio Rincón estaba atestada a ambos lados de vehículos de todas clases, de manera que se suspendió la entrada de más automóviles hasta desalojarse el tráfico que existía. Las autoridades policíacas suplicaban a la gente que no llevaran niños al lugar del milagro, ya que se exponían a asfixia y accidentes. El Gobierno tomaba medidas para el día del milagro.